July 22, 2025

Taboo Temporada 2 (2025)

“La oscuridad tiene muchos rostros, pero ninguno tan aterrador como el que hemos creado nosotros mismos.”

La temporada 2 de Taboo no solo cumple con las expectativas, sino que las supera, llevándonos a un viaje aún más retorcido y fascinante que la temporada anterior. La serie, que continúa explorando los oscuros rincones de la mente humana, las traiciones familiares y las maniobras políticas de la época, se adentra en territorios peligrosos y alucinantes. Tom Hardy vuelve a interpretar a James Delaney con la misma intensidad que le ha valido la admiración de los fans y la crítica, y el show sigue siendo un festín visual de intriga y oscuridad.

Un regreso tan oscuro como el alma de James Delaney

La temporada comienza con James Delaney, nuestro enigmático protagonista, enfrentando la compleja y peligrosa red de conspiraciones que lo rodea. Esta vez, el escenario ha cambiado. Mientras Delaney trata de mantener el control de la compañía que heredó de su difunto padre, se encuentra atrapado en una guerra de poder que involucra a la corona británica, las familias rivales y el peligroso mundo de las rutas comerciales del siglo XIX. Sin embargo, el oscuro pasado de Delaney sigue acechando, y sus propios demonios internos lo empujan a límites peligrosos.

Lo fascinante de Taboo es cómo cada episodio profundiza en la psique de sus personajes. James no es solo un hombre atormentado por su pasado; es un hombre dividido entre la venganza y la redención. A lo largo de la temporada, el espectador es llevado por una montaña rusa emocional mientras Delaney lucha por encontrar un propósito más allá de su propia destrucción. Hardy, como siempre, ofrece una actuación magistral, llena de matices, con una presencia que hipnotiza a cada instante.

Un juego de poder y traición

Si algo define a esta temporada, es el tema del poder. La temporada 2 explora con maestría cómo las alianzas se rompen y se forjan en el contexto de las intrigas políticas y económicas del siglo XIX. La lucha por el control de los recursos y las rutas comerciales es implacable, y Delaney se encuentra en el centro de todo. Cada movimiento que hace está calculado, pero también está marcado por su propia moralidad distorsionada y sus ansias de venganza.

La serie profundiza en la relación entre Delaney y la familia, especialmente con su hermana Zilpha (interpretada por la cautivadora Oona Chaplin). La química entre Hardy y Chaplin es palpable, y su tormentosa relación se convierte en uno de los puntos más destacados de la temporada. Zilpha, atrapada entre la lealtad a su hermano y sus propios deseos, es un personaje que evoluciona y se enfrenta a sus propios demonios. La dinámica entre los dos personajes es eléctrica, cargada de tensión y pasión, y nunca sabes si su relación los llevará a la redención o al abismo.

Nuevos enemigos, viejas amenazas

Si bien la temporada anterior presentó a varios personajes complejos y ambiguos, la segunda temporada amplía este elenco con nuevas amenazas. Los personajes como el misterioso y peligroso empresario Sir Stuart Strange, interpretado brillantemente por Jonathan Pryce, se convierten en piezas clave en el tablero de ajedrez político que se despliega. Strange no es un villano típico; es un hombre calculador que juega sus cartas con una frialdad implacable, y su relación con Delaney está llena de giros y secretos.

Pero los enemigos no son solo aquellos que aparecen en la pantalla. La propia sociedad, con sus normas y su estructura rígida, se presenta como otro obstáculo a la libertad de Delaney. En este mundo, el poder no solo lo define la fuerza, sino también el conocimiento, la manipulación y la astucia. Cada personaje tiene sus propios intereses, y ninguno es completamente bueno o completamente malo, lo que hace que la trama se sienta real y visceral.

Un ambiente opresivo y envolvente

Lo que realmente distingue a Taboo es su atmósfera única. La producción de la serie ha mantenido su estilo visual sombrío, con una paleta de colores que transmite la oscuridad y la decadencia de la época. Las locaciones son impresionantes y, a veces, aterradoras: las calles mojadas de Londres, los oscuros pasillos del Parlamento, las imponentes mansiones. Cada escena está cuidadosamente diseñada para sumergir al espectador en un mundo donde la desconfianza y la paranoia son palpables.

El diseño de sonido también juega un papel fundamental en esta atmósfera inquietante. La música, a menudo minimalista, se combina con los ruidos del entorno, creando una sensación constante de peligro inminente. A lo largo de la temporada, el sonido se convierte casi en un personaje más, marcando el ritmo de la narrativa y añadiendo tensión a cada momento clave.

La cuestión del legado

Un tema recurrente en Taboo es el legado. James Delaney lucha con la herencia de su padre y la sombra de las decisiones que lo trajeron a este punto. A medida que la temporada avanza, las preguntas sobre el destino y la inevitabilidad de los actos humanos se vuelven más presentes. La guerra por el poder no solo es una cuestión de riqueza y control, sino también una cuestión de identidad: ¿quién es Delaney y cómo se define frente a su propio legado?

Al final de la temporada, la pregunta sigue siendo la misma: ¿puede Delaney escapar de la oscuridad que lo consume, o será este el legado que dejará atrás? Los giros finales son impactantes, llenos de suspenso y dejando al público ansioso por la siguiente entrega.

Conclusión: Un thriller emocionalmente electrizante

Taboo Temporada 2 es una obra maestra que combina lo mejor de la narrativa histórica con el thriller psicológico. Tom Hardy ofrece una de sus actuaciones más impresionantes, y el guion, cargado de giros sorprendentes, mantiene al espectador en vilo durante toda la temporada. Es una historia de poder, venganza, traición y redención que no solo atrapa por su trama, sino por sus personajes complejos y sus profundidades emocionales. Si eres fan de los dramas históricos que exploran la naturaleza humana en su forma más cruda, esta temporada es imperdible.